La palabra soma viene del griego y significa “cuerpo vivo”. Hace referencia a la parte olvidada de los sistemas de salud occidentales.

Es la forma en la que cada persona percibe y experimenta su mente y su cuerpo y cómo utliliza esta información para autoregular sus emociones y sanar. Todos nuestros movimientos (caminar, bailar, limpiar, abrazar, comer, saltar…) generan unas emociones y unos cambios fisiológicos diferentes en cada uno de nosotros ¿Qué significa ésto? Que al cuidar el cuerpo también cuidamos lo que sentimos y la forma que tenemos de ver el mundo.

La somática es la unión entre la mente y el cuerpo. Hace referencia a todo aquello que podemos experimentar a través del movimiento. Gracias al cuerpo podemos sentir alegría, expresarnos, ser creativos…

En definitiva, el cuerpo nos permite experimentar el fenómeno de la vida y la somática nos ayuda a que esta experiencia sea lo más plena posible.

En el trabajo corporal desde una perspectiva somática, la protagonista eres tú. El terapeuta es sólo es una guía que facilita las herramientas para que el paciente entienda el lenguaje de su cuerpo, detecte qué necesita y conozca cuáles son las mejores técnicas para él mismo.

Algunos terapeutas somáticos son Thérèse Bertherat, Thomas Hanna, Blandine Calais- Germain, Rudolf Laban o Gerda Alexander.